Ni bien finalizó la conferencia de prensa del jurado de Outdoor, Maxi Itzkoff fue al encuentro de Pablo del Campo. La noticia que le había dado al presidente de la agencia unas horas antes, cuando recién se bajaba del avión, era exactamente la que quería escuchar –hace mucho tiempo-. Esa noticia que hacía que en ese momento no importara nada más, ni siquiera la conversación del taxista que lo traía hasta Cannes acerca del mal momento futbolístico de Francia –el equipo local acababa de perder con Sudáfrica y quedaba fuera del mundial-.
Tras el abrazo emotivo en la planta baja del Palais des Festival y el saludo de todo aquel que se había hecho eco del rumor y se acercaba a saludar, faltaba darle la noticia a un tercer miembro del equipo: Mariano Serkin.
En el camino se cruzaron desde Martín Mercado –Y&R Argentina- y Guido Rosales –Coca-Cola-, hasta Marcello Serpa –AlmapBBDO Brasil-. Finalmente, ya en la puerta del Palais Stephanie, los tres festejaron con un abrazo el tan ansiado Grand Prix de Outdoor que les había sido otorgado en la categoría Ambient por su trabajo para cerveza Andes.
“¿Cómo empezó esto?”, repite Del Campo. “Hace diez años”, responde. “Hace mucho tiempo”, agrega.
“No hay una obsesión de ser los primeros, sino de estar en condiciones de pelear arriba, y para eso es necesario hacer un buen trabajo. La vocación que tiene la agencia es lograr que salga el mejor trabajo posible para la marca y los premios alcanzados en el festival son un gran termómetro para medir el impacto de la campaña. Al final del día, lo que nosotros buscamos con nuestro trabajo es generar impacto”, explica el presidente de la agencia.
Además, Del Campo destaca que el cliente, por su parte, tiene una gran vocación de impacto publicitario: “La gran ventaja que tiene ser una cerveza subregional es que lo deja al cliente bastante relajado para comprar ideas que vayan más allá de ideas tradicionales”.
Sobre este punto, Itzkoff y Serkin cuentan que el cliente buscaba una idea tradicional, un comercial de TV como cualquier año, pero que ellos habían llegado a la conclusión que haciendo “una nueva linda historia” iban a hacer lo mismo que todas las cervezas. “Entonces dijimos por qué no hacemos por primera vez algo que los hombres realmente puedan usar y que marque concretamente esta filosofía de entender a los hombres y hacer algo por ellos. Lo que surgió fue el invento. El Andes Teletransporter”.
-¿Qué les dijo el cliente cuando le contaron la idea?
-Que era una locura. Pero que también querían un comercial.
“El día que nos juntamos a hablar de la cabina, dijimos que este era el comienzo de un Grand Prix de Cannes. Está filmado”, confían los creativos, como muestra de la confianza que tenían de que estaban frente a una pieza que prometía buenos resultados.
A partir de aquí, se realizó un teaser que contaba cómo funcionaba la cabina. “La problemática que teníamos desde que el cliente llegó a la agencia es cómo hacer para que Andes, que está compitiendo siempre con Quilmes, Stella, etc, sea tentadora para la gente de Mendoza. Y si bien es algo que podría haber sido hecho por cualquier otra cerveza, la realidad es que lo hizo Andes, se hizo en Mendoza y está sólo ahí. Y ahora pasó de Mendoza para el mundo”.
De esta manera, se buscaba direccionar a los hombres a los bares por ser el lugar donde más se consume cerveza. “Lo más complicado fue hacer las cabinas (hubo 15 que se distribuyeron entre los principales bares de Mendoza e iban rotando) porque tenían que ser acústicas, que a la vez dejaran pasar la señal del teléfono y que a través de el teléfono se escuchara bien. Dejamos de ser agencia para transformarnos en productora”, sostuvo Itzkoff. Del Campo agregó: “Esta es una de las dificultades que tienen las ideas nuevas, porque se necesita de una agencia con vocación de hacerlo y un cliente con vocación de arriesgarse y hacerlo. Porque un cliente que quiere estar 100% seguro, no hace esto”.
“Lo que más contentos nos pone es haber hecho un trabajo relevante para nuestras marcas y consolidar el equipo que formamos con Maxi. Después, lo que pase en el Palais depende de la suerte”, opinó Serkin. Su dupla en la dirección general creativa de la agencia agregó: “Este año sí teníamos algo claro y es que queríamos tener un contender de Cannes. Y eso no es una linda gráfica o un lindo comercial, sino un caso del que hable todo el mundo”. ¿Por qué? “Porque son esos cuatro o cinco piezas de las que se hablan en los pasillos las que muestran nuevas maneras de hacer crecer al cliente. Encontrar ideas que pueden romper con una tensión cultural que en este caso tiene que ver con cómo hacer que los hombres puedan salir, disfrutar y hacer felices a sus mujeres”, respondió Serkin. Y comentaron también que las cabinas fueron utilizadas más por las mujeres que por los hombres, más allá de que el target comunicacional de la cerveza son los hombres.
Por último, con respecto a los objetivos de la agencia de aquí en adelante, Del Campo asegura: “ideas y más ideas, construcción de marca, tener un equipo cada vez más consolidado… Todo esto lleva a armar plataformas para que ocurran buenas ideas. Si la agencia no apuntara a esto, realmente tendría otro negocio”.