Verónica Hernández Aguilar, co CEO de Ogilvy México y Miami, cuenta con más de 20 años de trabajo en la agencia. Hace un año lidera junto con César Agost Carreño las oficinas de México y Miami, que pasaron a funcionar como cluster.
Si bien la profesional se formó en marketing, le contó a Adlatina que siempre supo que se abocaría al trabajo en agencias. “Me atrajo la creación de grandes ideas y cómo podían transformar la percepción de las marcas, su diversidad y que siempre estaría haciendo cosas distintas”, contó.
Sobre la agencia en la que lleva 19 años, la ejecutiva afirmó: “Ogilvy es como mi casa, como mi familia. Creo fielmente en la marca, su filosofía, su visión, estar un paso adelante, su exigencia por hacer las cosas bien, y el gran equipo que trabaja dentro de ella”. Además, destacó que hace de sus empleados grandes profesionales, ofreciéndoles oportunidades de aprendizaje y de crecimiento. “Ogilvy me hizo ser cada vez más exigente conmigo misma”, aseguró.
Hernández Aguilar aseguró que la distinción Women To Watch tiene un significado muy especial para ella. En primer lugar, por el reconocimiento a su trayectoria como profesional, ya que trabaja desde que se graduó hace 28 años. En segundo lugar, por ser una mujer que inspira y motiva a otras mujeres. Y por último, reflexionó que el reconocimiento le hace pensar sobre el legado que quiere dejar como profesional y como mujer en esta industria.

—¿Cuáles han sido los momentos más desafiantes de su carrera?
—Yo creo que cada escalón que he dado en esta carrera desde que empecé ha sido desafiante. En ocasiones me cuestionaba si podía lograrlo, pero me atreví a tomar el reto en cada escalón y me daba cuenta de que no era tan difícil. Te das cuenta de que sí son responsabilidades diferentes y decisiones de otro nivel, pero siempre tratando de hacer lo mejor posible. A veces te equivocas pero también de eso aprendes.
Me considero una mujer muy trabajadora, constante y perseverante además de ser una "estudiante nata". Me gusta y emociona aprender cosas diferentes y no me da pena preguntar si no sé de algo. Me acuerdo cuando en Ogilvy me dieron la responsabilidad de liderar el área de Health & Wellness, negocio del cual no sabía mucho. Me entrené y en dos años fue una unidad de negocio que creció en doble dígito. Si tienes la humildad de aceptar que no siempre vas a saber de todo y de aprender de los demás, será más fácil tu camino.
Creo que también un gran desafío en mi carrera ha sido el manejo de gente. No es fácil pero creo que siempre y cuando mantengas un equilibrio entre motivación y exigencia tendrás mejores resultados. Yo he tenido la suerte de tener personas a mi lado muy leales que me quieren y respetan, y de eso me siento muy agradecida.

—¿Cómo ha sido este primer año del cluster México-Miami? ¿Cuáles son los objetivos para 2018?
—Ha sido un buen año. Ogilvy Miami es una operación chica hasta ahora pero creemos que tiene un gran potencial. Junto con César Agost Carreño, hemos hecho varios cambios que creemos llevarán a Ogilvy Miami a otra posición en el mercado hispano.
En 2017 ganamos dos cuentas importantes: Red Stripe, cerveza del Grupo Heineken y AssistCard. Para 2018 el objetivo es seguir fortaleciendo y robusteciendo al equipo para continuar creciendo.

—¿Qué visión tiene de la industria publicitaria mexicana actual?
—Cada vez esta industria se vuelve más sofisticada, clientes más exigentes con desafíos de negocios más complejos. Tú, como agencia, tienes que prepararte y estar siempre un paso adelante. Tienes que rodearte de especialistas para dar soluciones de negocios a nuestros clientes.
Antes era fácil. Te pagaban una comisión de agencia o un fee anual y listo. Ahora los clientes exigen un verdadero valor agregado hacia sus marcas y negocios.
Cada vez hay mayor fragmentación de la atención del consumidor con diferentes puntos de contacto, buscando tener diferentes experiencias en los diferentes canales. Los consumidores se han convertido en participantes activos en la construcción y la transmisión del mensaje de las marcas, antes solo eran receptores pasivos. Esto hace que las agencias tengamos que tener una diversidad de talento y conocimientos técnicos que antes no eran necesarios.
La data rige todo, tus estrategias y tus mensajes. Estamos pasando de un marketing de audiencias a un marketing personalizado con nombre y apellido.
Cada vez hay más competencia, incluso las grandes consultoras ya están compitiendo con nosotros y si no tienes servicios o capacidades diferenciadas no puedes ofrecer un valor diferenciado a los clientes.
En nuestra industria, casi a diario, hay un tema nuevo del cual hablar y aprender.