Así como los padres y las madres cuentan con orgullo y emoción el desarrollo de sus hijos, desde sus primeros pasos y palabras hasta la caída del primer diente, los dueños y dueñas de pymes tienen un sentimiento similar con sus negocios.
En este marco, Santander y Don se centran en ese orgullo de tener una pyme para seguir construyendo sobre su posicionamiento como el banco de las pymes, y les acerca soluciones exclusivas para ayudarlas a seguir creciendo, incluso en contextos cambiantes.
“Desde Santander queremos acompañar a todas las pymes, a cada madre y padre que siente orgullo de su negocio, de su crecimiento y desarrollo. Queremos ser ese banco que está presente junto a ellos, que los ayuda a transitar las distintas etapas de sus emprendimientos, más allá de la coyuntura. Un banco que está cerca y que conecta con ellos con empatía y beneficios concretos”, comentó Gabriela Balestrieri, CMO de Santander.
Por su parte, Mariela Seijo, directora de grupo de marcas de Don, destacó que la campaña apela a esa fibra emotiva centrada en el esfuerzo que conlleva cada pequeño y avance y muestra cómo, con las soluciones del Santander, pymes que recién estaban naciendo ahora son grandes negocios.