“Me dediqué a esto muy chica, a los 19. Primero pensé en ser cuentas (¡obvio, mujer, cuentas!), pero mis ganas de escribir siempre fueron más fuertes”.
“A los veinte entré a Agulla, a mis 21 fue el año 2001. Hermoso momento para empezar a trabajar en publicidad”.
“Tuve que aprender rápido, había muchas cuentas para pagar en casa. Tenía que ser buena en esto, medio que no me quedó otra”.
“Hice una buena carrera en Buenos Aires: como agencias más destacadas puedo nombrar Madre y La Comu. Siempre con una identidad creativa bastante marcada: hacer lo que se me cantaba y ver quién me lo compraba”.
“A mis 28 decidí irme a Londres.
“Me apuré un poco, ahora a la distancia lo entiendo. Tengo esa cosa de siempre estar tirando de la piola, como estilo de vida”.
“En Londres no me fue tan bien como pensaba, creo también porque intenté camuflarme y ser una más de ellos. Me llamaban Laura (en inglés) y no me incomodaba; es más, me gustaba”.
“La segunda vez que me fui a vivir afuera, me agarró más madura en la vida”.
“No me camuflo más”.
“Estoy mega orgullosa de ser latina, no veo más lo anglo como ‘aspiracional’. Es más, me molesta que digan mi nombre en inglés”.
“Cada vez que me dicen ‘Lo-rah’, los corrijo a ‘Laura’, en español. Creo que es importante que pronuncien mi nombre tal como me lo pusieron mis padres”.
“A los 30-31 tuve una crisis muy fuerte y me planteé si esto me gustaba o no: estuve muy cerca de dejar. Me sentía un poco desconectada, como que mi yo y mi visión del mundo no estaban presentes en mi trabajo”.
“En un acto de lucidez, en vez de dejar, emprendí la búsqueda de encontrar mi voz y de hacer laburo que tuviera más que ver conmigo y mi visión del mundo. Ahí vino Axe, y toda la locura que llegó después de eso, y toda la exposición que trajo, de la buena y la no tanto”.
“Hay algo de este medio que si sos mina, te pone automáticamente en un lugar de influencer < de género y tu laburo casi que pasa a un segundo plano, medio que da igual. Yo quiero que mi trabajo sea el que influye a la gente, y que me llamen para hablar de mi laburo como a cualquier otro profesional.
No hay nada más igualitario que eso”.
“Me gusta hacer laburo que encapsule lo que está flotando en el aire, pero nadie se anima a hablar, que tenga una tensión clara y sea un poco polarizante también. Mucha gente tiene miedo a ser polarizante: a mí me parece genial y creo que se convirtió en mi marca personal”.
“Lo que más miedo te tiene que dar es que te ignoren, no que no le gustes a todos. Gustarle a todo el mundo está completamente sobrevalorado y es la fórmula perfecta para ser invisible”.
“Me gustan los premios, pero más me gusta hacer laburo que haga que vivir a 13 horas de donde vive mi mamá tenga sentido. El mejor premio que tuve fue cuando mi vieja vio un laburo mio y dijo ‘OK, entiendo que vivas lejos si podés hacer algo como esto’. El mejor GP de todos fue ese”.
Fue creativa y directora creativa de las mejores agencias argentinas.
Fue copy en Fallon Londres.
Fue executive creative director de 72andSunny en Ámsterdam.
Desde hace pocos días es la nueva chief creative officer for global brands en Grey, basada en Londres.
No toqué ni una coma del texto que me mandó contando su historia.
Me pareció increíble.
Una mezcla de lucidez, mesura, inteligencia emocional.
Se nota que ha vivido, que ha sufrido, que tiene claro por qué y para qué se dedica a la publicidad.
Que ama lo que hace. Que ama más hacerlo muy bien.
Su campaña Find your magic para Axe reinventó la marca.
Su campaña para lograr la aprobación de la ley de aborto en la Argentina es icónica “y nadie sabe que la hice yo”, me dice en un whatsapp.
Googleá Si no es legal, es clandestino y mirá lo que Laura es capaz de hacer.
La publicidad vale la pena por gente como ella.
Al principio de este texto que me mandó, me puso: “Decime si está bien, si falta algo, si me quedé corta”.
Hasta en esos detalles me parece una genia.
INFLUENCIA (*).
Nos sobra talento. Nos falta influencia.
Fernando Vega Olmos
(*) Los interesados en proponer nombres deben escribir a fernandovegaolmos10@gmail.com incluyendo en el asunto: “Influencia”.