—¿Cómo es el modo de trabajo de una agencia independiente en medio de una pandemia?
—Es una situación compleja no solamente en los Estados Unidos: sólo esperamos respetar las normas de salubridad y que así todo mejore poco a poco. En Nueva York se está manejando de la mejor forma posible: hay muchos casos, pero en paralelo es el lugar donde se hace la mayor cantidad de tests en el mundo, así que esto ayudará a controlar la infección de mejor forma. Al ser un país grande, cada estado está tomando sus medidas, pero en Nueva York se están haciendo las cosas bien en general. En términos publicitarios, es una época para ser pacientes y altamente proactivos como agencia; existen también mayores oportunidades para agencias boutique, pues resolvemos problemas de clientes más rápido y sin tantos costos de overhead extras de las agencias grandes. Nuestra filosofía es bastante clara: somos una agencia hands-on (manos a la obra).
—¿Qué los impulsó a abrir su propia agencia, luego de haber trabajado en las mejores del mundo?
—L&C es una agencia bastante joven, recién cumplimos el primer año y hemos logrado hacer proyectos interesantes para el mercado de los Estados Unidos y también para Latinoamérica. Mantenemos un equipo reducido (diez personas entre ambas oficinas, Nueva York y Lima), pero a su vez bastante específico y profesional, que hoy en día es aún más valioso en el contexto de la crisis. Nosotros ya veníamos trabajando vía Zoom diariamente hace un año, conectando entre ambas oficinas y utilizando capacidades tanto para briefs en los Estados Unidos como en Latam. Si bien hay una reducción en la actividad e inversión publicitaria, se da también una oportunidad, pues los clientes están buscando trabajar en más proyectos y generar buenas ideas que impacten sin tanta burocracia y gastos extra innecesarios que presentan muchas de las agencias grandes de holdings. Creo que nuestro modelo es de alta creatividad y rapidez en acción. Vinimos madurando la idea por más de quince años, desde que salimos de Perú y trabajamos en varias agencias. Fuimos aprendiendo de distintas culturas de agencia, clientes y mercados diversos, y pensamos que este era el mejor momento. Creemos que nuestra nueva agencia es el último paso de quince de años de trabajo y, a su vez, el primer paso de algo completamente nuevo.
—¿Qué significó para ustedes haber sido elegidos para crear la campaña oficial de The One Show?
—Una gran oportunidad. Le dio exposición a la agencia y realizamos un buen trabajo creativo, con resultados importantes para el festival. Sin dudas es importante, pues las campañas de años anteriores habían sido hechas por agencias consolidadas que admiramos, como The Community y McCann Nueva York, entre otras: eso nos indica que vamos por el buen camino.
—¿Podrían hacer un balance del trabajo de la agencia? ¿Con qué cuentas trabajan?
—El balance ha sido positivo. Empezamos siendo sólo dos personas en Nueva York y hemos logrado tener dos micro oficinas que se complementan con el talento de cada una de ellas. Hemos realizado campañas importantes para clientes como American Express, The One Club, Hochschild Mining y Qroma.
—¿Qué desafíos afronta un creativo en la actualidad?
—Necesita ser más que un creativo en rol: tiene que saber de producción, de estrategia y de negocios. Las agencias hoy en día son mas rápidas, ya que el mercado es mas dinámico y es necesario tener referencias no sólo de creatividad, sino también del negocio publicitario. No basta con tener buenas ideas: las agencias con grandes estructuras cada vez están desapareciendo, por lo que el creativo tiene que desarrollar más skills para ser más valioso para su agencia.
—¿Cómo consideran que será en un futuro la industria publicitaria? ¿Qué hábitos generados durante la pandemia se quedarán y que otros será mejor olvidar?
—Creemos que la pandemia ha acelerado la industria publicitaria en diez años. Queda claro que lo importante de una agencia son sus ideas, la estrategia y la capacidad de llevarlas a cabo en tiempo récord. Quedó de lado el tiempo de meetings innecesarios y grandes agencias de oficinas lindas sin ideas detrás. Se ha democratizado el panorama y se les está dando más oportunidades a los smaller players como nosotros.