—¿Cómo fue asumir un nuevo rol en este contexto?
—Nos descolocó, como a todos. Mis objetivos son seguir creciendo y seguir aprendiendo para lograr ser mejor, y poder llevar adelante este nuevo rol de la mejor forma posible.
—¿Qué herramientas y capacitaciones deben tener las agencias en la actualidad?
—Todas las posiciones de liderazgo te ponen en un lugar de aprendizaje constante. Para mí, está basado en los aciertos y desaciertos que uno tiene. Desde mi lugar, trato de conectar con esos aciertos y ver las cosas que funcionan y repetirlas, tomarme el tiempo para ver los desaciertos y construir sobre ello. Hoy es un momento para intercambiar opiniones y aprender a escuchar. Lo más valioso que tenemos hoy es la diversidad de pensamientos y el intercambio en el conocimiento entre las personas, y eso nos ayuda a potenciarnos o enriquecernos también como profesionales. En cuanto a las herramientas que utilizo, y es importante que todos las tengan en cuenta, por la temática relevante y lo que implica, son la perspectiva de género, la diversidad y la inclusión en las organizaciones y la sustentabilidad. Yo creo que eso debería ser parte de nuestros skills en un futuro muy cercano, y por eso me lo tomo como una responsabilidad y lo empecé a practicar y aprender, porque creo que es muy importante.
—Hace poco lanzaron una publicidad de Brahma en la que invitan a diferenciar las latas con stickers en encuentros sociales. Como las fases de aislamiento son distintas en cada región o país, ¿cómo hacen para unificar una campaña?
—Tratamos de acercarle una solución a cada consumidor; más en esta nueva realidad, en que es tan necesario. Tratamos de que las marcas no estén sólo en el decir, sino también en el hacer. Con Brahma lanzamos una idea para concientizar al consumidor sobre la importancia de no compartir la bebida o lata en estos momentos. Como todas las latas de Brahma son iguales, pensamos en stickers para diferenciarlas al momento de juntarte, a futuro, y con eso dar un aporte pensando en cuando nos volvamos a juntar. Con respecto a lo que sucede en las provincias, hicimos un análisis, tuvimos que monitorear el contexto para entender en qué lugares del país se estaba flexibilizando el aislamiento y en cuáles no, trabajamos en conjunto con una empresa de research y otra de prensa para ver la evolución. Esta campaña primero se lanzó en el interior del país y luego en AMBA y GBA. Estamos en un estadio de prueba y error, por la incertidumbre que se genera: tratamos de hacer investigaciones para dar el mensaje correcto a las personas correctas y también transmitir que es para cuidarnos.
—¿Cómo fue y cómo sigue siendo el vínculo con los clientes en estos meses? ¿Se piensa en planificar a largo plazo?
—El vínculo con los clientes es muy fuerte. Tratamos de escucharlos y contenerlos, y ellos a nosotros, porque obviamente es un momento distinto para todos y hay mucha incertidumbre. Se piensa a largo plazo porque todo sigue y es necesario seguir trabajando. Hay marcas que necesitan reactivar, entonces como agencia estamos respondiendo a briefs para este año y para el año que viene. Sentimos que hay que saber adaptarse y estar atentos a que pueden venir cambios en el camino, porque el contexto va evolucionando y tenemos que aceptar que eso puede pasar. Nos tenemos que preparar y pensar una comunicación que sea modular o que funcione después, por si surge algo. En la agencia hay apuestas y mucho trabajo y todos los clientes necesitan el largo plazo y también el corto: salir ya con comunicación y reactivar sus ventas; la mayoría pertenece al rubro de consumo masivo.
—Pregunta del público: ¿qué la llevó a quedarse en Santo tantos años?
—Le tengo un cariño enorme a la agencia y la verdad es que siempre encontré mi espacio. Es un lugar donde me siento bien y me dejan ser. Todo mi crecimiento fue ahí. La agencia no tiene una estructura fija y eso me ayuda a mantenerme todo el tiempo con ganas de seguir y despertarme cada día con un problema o desafío diferente. No me cansó.