Por Pancho Dondo
Jefe de redacción de Adlatina
(Foto: Monteleone)
“No persiga los premios; los premios le llegarán; trabaje en grande para hacer gran trabajo”. La tercera de las nueve “reglas para que una agencia sea más creativa” que Per Pedersen enumeró ayer a primera hora de la tarde desde el escenario mayor ―The Adobe Stage― del Festival D&AD le sirvió de pie al danés que dirige la creatividad mundial de Grey para lanzar la queja mencionada en el título de esta nota: “Hace ya bastante años que en los festivales publicitarios del mundo se impuso una mafia creativa latina que pretendió cambiar los premios y por momentos hasta lo logró ―acusó―. Basta, no podemos seguir premiando scam ads, y disculpen los que sean latinos, pero los festivales tienen que volver a ser lo que fueron siempre: premios para trabajos reales”.
Tras ese descargo que tuvo algo de explosivo, Pedersen proyectó a sus espaldas, sobre el escenario, una foto en blanco y negro de Anselmo Ramos, y a continuación una del ecuatoriano Eduardo Maruri. “¿Los conocen? ―preguntó retóricamente―. Ramos es uno de los gestores de Gut y antes fue una de las razones para la explosión de David. Y Maruri, a pesar de que en la foto es cierto que tiene un aspecto un poco mafioso, es el responsable de nuestra creatividad en Grey Europa. Amo a publicitarios como estos porque son los que cambian las cosas, los que empujan la industria hacia adelante”.
Terminada de ese modo su ampliación de la regla número 3, Pedersen regresó al listado que había comenzado unos minutos antes con una referencia al gran trabajo como herramienta infalible para resolver todos los problemas, y fue enumerando y comentando las seis que faltaban:
1. El gran trabajo resuelve todos los problemas. No deje que nada se interponga en ese camino.
2. Deje de crear avisos que parezcan avisos o tengan un discurso de aviso.
3. No persiga los premios; los premios le llegarán; trabaje en grande para hacer gran trabajo.
4. Pavonéese como un rock star. Triunfe en la cultura pop y jamás se transforme en corporativo.
5. Deje la sala de reuniones y abandone su arrogancia. Conforme una red de seres humanos apasionados por patear traseros.
6. Ponga a la creatividad en el centro y a la gente creativa en la cima.
7. Rompa los procesos estúpidos que matan la creatividad. Suelte la creatividad en vez de administrarla.
8. Celebre sus fallas heroicas como parte del éxito. No deje que el miedo evite que nadie sueñe en grande.
9. Deje de decirle a su agencia lo que hace. Deje de hacer lo que le piden que haga.