Alejandra Ballesteros es la directora general de la agencia Anónimo. Comenzó su carrera en Y&R, en servicio a clientes, y trabajó en diferentes agencias trasnacionales como Lowe y DDB. El día 31 de marzo será galardona con el premio Women to Watch México 2020: “Haber sido elegida Woman to Watch es un reflejo de la dedicación, el compromiso y la pasión y de un trabajo bien hecho durante más de veinte años. Un trabajo que ha valido la pena”, asegura Ballesteros. La directora agrega que también es demostrarse a sí misma que hizo bien al elegir perseguir una carrera que la apasiona y llegar hasta donde está hoy en una industria tan dominada por hombres. “Significa mucho poder servir también de inspiración para tantas otras mujeres talentosas que trabajan todos los días buscando alcanzar sus metas, demostrándoles que las cosas se pueden lograr de diferente forma a la tradicional”, dice.
Agrega que es un reconocimiento que comparte con toda su familia: hermanas, sobrinas y sobre todo su mamá “una mujer maravillosa que fue siempre un ejemplo para mí y a quien acabo de perder muy recientemente”, cuenta. “Afortunadamente alcancé a contarle del reconocimiento y cuando le dije no hizo más que ponerse a llorar y a decirme cuán orgullosa estaba de mí. Aunque no estará conmigo físicamente durante el evento, haberlo podido compartir con ella significa mucho más que cualquier felicitación, pues su amor fue siempre un detonante para impulsarme a perseguir mis sueños y a desarrollarme profesionalmente”, destaca.
—¿Cuál cree que es hoy en día el desafío más grande para una creativa o un creativo en publicidad?
—Evolucionar. Trabajamos en una industria llena de gente joven y vivimos en un mundo que está en continuo movimiento, donde nada es estático, donde no hay fórmulas, donde lo que funciona hoy no necesariamente funcionará mañana y donde hay que innovar cada instante. El gran desafío está en entender todo eso, entender la enorme importancia que tiene la comunicación en el éxito o fracaso de una marca, conocer a fondo el negocio de los clientes y trabajar muy duro para brindarles ideas, no solamente anuncios que les ayuden a crecer.
—¿Cómo se adaptan a los nuevos requisitos del consumidor?
—Yendo un paso adelante, siendo muy proactivos y trabajando con la mezcla perfecta de gente joven que tenga ideas frescas y gente con experiencia que sepa guiarlas y estructurarlas. Buscando todos los días encontrar al talento que sea capaz de potencializar las tensiones culturales relevantes que nos permitan crear ideas que conecten a las marcas con sus consumidores.
—¿Qué valor diferencial tiene Anónimo en comparación con otras agencias? ¿Cómo evolucionó la agencia en este tiempo?
—Anónimo es una agencia que nació con un modelo diferente. Con la idea de ser, más que una agencia de publicidad, una compañía de ideas, casi una consultora creativa. Una compañía que busca entender todos los días los problemas y necesidades de las marcas y el entorno cultural en el que se desarrollan. En ese sentido, la agencia ha sabido no sólo adaptarse al día de hoy sino evolucionar constantemente para seguir a la vanguardia en el entendimiento del consumidor, de las marcas y de la industria, enfocándose al 100% en la creatividad y haciendo que las cosas sucedan. Generando ideas que provoquen, que se vean en la calle y de las cuales la gente hable.
—¿Cómo ve la situación de la industria publicitaria mexicana?
—Complicada, llena de incertidumbre, donde los clientes se comprometen cada vez menos con las agencias a la largo plazo y buscan trabajar por proyectos, esto nos exige a las agencias seguir trabajando para mostrarles el valor agregado que podemos darles. Quizás nuestro mayor desafío todos los días, mucho más siendo una agencia independiente, es ese: mostrarles a los clientes el valor que podemos generarles a sus negocios.
—¿Cuál fue el mayor desafío que tuvo que afrontar a lo largo de su carrera?
—Siendo una mujer que ha tenido que ver por sí misma, sin duda dejar la comodidad y la seguridad de trabajar en una agencia transnacional para apostar por una independiente, con toda la incertidumbre que eso representa, sobre todo al inicio. Años después puedo decirte que ese desafío ha sido también la mejor decisión que he tomado en mi carrera.