WPP ordenó cancelar todas las contrataciones hasta principios de 2019 según indicó su CEO, Mark Read. El holding ha echado atrás las contrataciones de unos 2.000 nuevos empleados. “Tenemos que tomar medidas urgentes para detener esto ahora”, para “tratar de proteger el negocio en los próximos años”, señaló David Barker, financial controller del grupo. WPP emplea a unos 134.000 empleados.

De esta manera, Read busca mejorar el desempeño del Grupo, luego de que Martin Sorrell dejó el grupo, y por la pérdida de negocio de cuentas como Ford, que pasó a manos de Omnicom. Además, WPP busca recortar gastos ante nuevos rivales digitales emergentes. 

Desde su llegada oficial hace dos meses, Read está poniendo en marcha medidas de choque para recortar costos y hacer crecer el negocio de la compañía. En este sentido, se anunció recientemente la fusión de VML con Y&R y se especula sobre la fusión de otras marcas del grupo. Asimismo, entró en juego el futuro de Kantar dentro del grupo, ya que la junta directiva aprobó los planes de Read para vender parte de las consultoras. El CEO informó que se está buscando un socio estratégico que participe en las acciones de Kantar. Sin embargo, la venta no será completa, por lo que reducirá las libertades sobre la compañía que tenga el potencial comprador. 

Todo ello con el objetivo de dar la vuelta a la situación económica de la compañía, cuya valoración en la Bolsa se ha reducido a la mitad respecto a hace un año y medio.

En los últimos resultados trimestrales publicados, WPP presentó un descenso de sus ingresos del 1,6%, principalmente por la mala marcha del grupo en su principal mercado -Norteamérica-, que ha caído casi un 6%. Para el cierre del ejercicio, la compañía espera reportar una bajada de entre el 0,5% y el 1% en su facturación.

Pero, al parecer, WPP no es el único grupo que reduce sus gastos de inversión, ya que Omnicom señaló un trimestre con la anunciada cesión de Sellbytel, así como de otras 18 empresas “no alineadas con nuestra agencia a largo plazo”, según explicaron, y una reducción de plantilla de unas 7.000 personas como resultado de los cambios. Según aseguraron desde el holding, la venta de Sellbytel es el resultado de la evaluación continua de Omnicom de su cartera de negocios, consistente con su plan estratégico y sus prioridades de inversión.