“¡Lanzamos The Cyranos Argentina! ―es lo primero que anuncia Vanina Rudaeff, hasta hace muy poco tiempo CEO de la oficina de J. Walter Thompson en el país y, desde ahora, futura responsable principal de la agencia que, apenas tenga lista su sede, abrirá físicamente sus puertas en la zona de La Lucila, en la zona Norte del Gran Buenos Aires―. Y lo hacemos de la mano de estos dos señores, Leandro Raposo y Gustavo Martínez”.

“Y Vanina será la líder del proyecto”, es lo primero que anuncia Leandro Raposo, que viajó especialmente desde su Barcelona adoptiva para el anuncio del proyecto―. En España el nombre sigue siendo The Cyranos McCann aunque yo hace dos años le compré la agencia a la red en Barcelona. Venimos de pasar dos años muy buenos en todo sentido, con este concepto de estructura pequeña, flexible y muy senior, con trabajos para clientes globales en los que la creatividad es el centro. La novedad anterior se dio hace unos meses, cuando hicimos un acuerdo para armar una agencia asociada a este grupo desde Madrid, Sioux Meets Cyranos, con Roberto Lara, uno de los fundadores de Sra. Rushmore, al frente. Y lo que ahora nace aquí es The Cyranos Argentina, como agencia independiente. La marca es la misma, The Cyranos, pero va a ser una agencia independiente, autosuficiente y con su propio equipo, aunque obviamente compartiendo la filosofía del modelo Cyranos, de gente muy senior y con una estructura pequeña. Todos los que estamos acá venimos de multinacionales y quisimos hacer un modelo mucho más flexible y en el que volvamos a tener contacto con el trabajo real”.

Con respecto a la estructura “flexible y senior” que ya viene desempeñándose en Barcelona, Gustavo Martínez, que colabora con la agencia, aporta que se trata de un staff no sólo español, sino multicultural: “Hay suecos, ingleses, brasileños. Eso sí, como dice Leandro: toda gente muy senior”.

“¡Y lo mismo en la Argentina!”, agrega Raposo, con la mirada depositada en Rudaeff, quien toma la palabra: “La impronta con la que arrancamos es la de Barcelona, que constituye un modelo a seguir. No pretendemos modificar eso. Todavía no estamos anunciando los nombres concretos del equipo porque estamos armándolo, pero sí podemos contar que será súper senior. De todos modos, más allá de esos detalles burocráticos, para mí lo más interesante es contar el momento en que los tres nos situamos hoy. Yo hice siempre mi recorrido en la Argentina; Leandro, en la Argentina y España; y Gustavo, en España, en la Argentina y en el mundo”.

Interrogados sobre los vínculos previos de los tres que componen el equipo directivo, surge que el nexo entre Raposo y Rudaeff fue el propio Martínez: “Yo coincidí con Leandro en McCann y a Vanina la contraté para la Argentina cuando yo estaba en J. Walter Thompson y su performance fue espectacular”.

“Y yo, aunque nunca trabajé con ella, vengo siguiendo el trabajo de Vanina desde siempre ―interviene Raposo―, incluso desde que ella estaba en Vegaolmosponce y yo en Agulla & Baccetti y de pronto nos vimos siendo parte de la misma red (Raposo se refiere a la fugaz etapa en que las antiguas Ammirati Puris Lintas y Lowe se fusionaron en el mundo y se generó cierta incertidumbre, y hasta rumores de fusión también, en sus dos afiliadas en la Argentina). Siempre hubo una cercanía, pero nunca habíamos coincidido. Y si uno viene desde otro país y va a abrir una agencia en la Argentina, el nombre de Vanina decanta de modo natural: no me imagino elección mejor ni más cantada, no somos ningunos genios del headhunting por haberla elegido”.