“De la forma natural en que convivimos con tres o cuatro servicios de streaming de audio o video al mismo tiempo ―explica Roberto Bonilla, head of planning del FiRe Advertainment Group puesto a describir de qué trata el informe Estamos en el negocio de la anticipación que el grupo acaba de poner en circulación y que al pie de esta nota puede descargarse―. De la amenaza siempre latente de YouTube por conquistar los contenidos de alta duración y presupuesto. De la apuesta de Instagram para cambiar la televisión. De China adueñándose del entretenimiento global sin que nos demos cuenta. De Travis Scott reinventando la música en Fortnite. Del fin de las consolas y del inicio del reinado de los deportistas electrónicos. De todo eso y de varias cosas más en la frontera entre marcas y entretenimiento habla este report de FiRe Advertainment Group sobre la anticipación. Escribimos largo porque nos gusta pensar profundo. Dicho eso, si quieren anticiparse, empiecen desde el capítulo que quieran (hablamos de entretenimiento, la idea es que se diviertan). La pandemia llegó a borrar fronteras para siempre. Esperamos un 2021 incierto, pero desafiante”.
Por su parte, el fundador y CEO del grupo, Rodrigo Figueroa Reyes, cierra las 96 páginas del informe con una postura bien clara: “The new normal, o la nueva normalidad, es como bautizaron a lo que está sucediendo ahora y lo que vendrá en la pospandemia. Me voy a permitir ser un poco escéptico con respecto a esta definición. Está claro que nada será igual porque el encierro dejará una huella imborrable y algún que otro cambio de hábito. Pero no seamos tan ilusos de pensar que la gente no querrá tomar decisiones con un café de por medio, ir al teatro, ver una final de CS:GO en un estadio o gritar los goles de su equipo favorito en vivo y en directo. ‘Todo pasa’, como decía un gángster conocido: si no, las mujeres no volverían a parir después del dolor o nadie emprendería nuevamente luego de un fracaso. Llegará una vacuna, hablaremos más por Zoom, pero les aseguro que llevo por lo menos diez años de teletrabajo (si no, hubiera sido imposible montar FiRe en Madrid y Latinoamérica) y necesito ir a la oficina dos veces por semana para ponerles cara a los proyectos. Para mí, la nueva normalidad es la empatía con el otro. No hablo de ricos y pobres, sino de entender que sin el otro no hay un todo. Políticos que deberán justificar adónde van las partidas presupuestarias (el sistema sanitario quedó en evidencia); empresarios atentos a sus empleados (a la distancia se nota mucho más el valor del trabajo en equipo). ¿La tecnología? Seguirá acelerando todo. Hablar por WhatsApp con cualquier país del mundo desde el auto o atender un Hangout sin imagen desde el supermercado acorta distancias, pero viajar seguirá siendo irreemplazable, ya que uno no se traslada por negocios, sino para conocer la cultura de cerca. No fui a Tel Aviv o a Corea del Sur y no creo que a eso lo reemplace un tutorial”.
EL INFORME EN PDF