Wunderman y Penn Schoen Berland presentaron el estudio ¿Las empresas realmente se están digitalizando?, una investigación para la que se consultó a más de 250 responsables senior en la toma de decisiones empresariales de marcas globales. El estudio arrojó una brecha importante entre reconocer desafíos y crear nuevas oportunidades.
La digitalización es una realidad que avanza cada día con mayor rapidez en las estructuras empresariales para dar respuesta al consumidor. Sin embargo, todavía hay discrepancia entre las ideas y la acción, ya que mientras el 72% de las marcas dice enfocarse en el futuro, el 70% no resignará utilidades a corto plazo pensando en un horizonte que hoy ven lejano.
El 59% de los encuestados declaró no estar satisfecho con sus inversiones de marketing actuales, y el 56% no está contento con aquellas en data. A pesar de esto, el 99% cree que la data es clave para tener éxito, pero el 62% se ve incapaz de convertir esos datos en insights o en una acción. A nivel comunicación, el 68% no usa esa información para crear mensajes relevantes que lo ayuden a crear marca.
“La transformación digital que buscan las empresas debe estar centrada en la experiencia que tiene el consumidor con la marca y cómo hace ésta para entender realmente lo que el consumidor necesita. En base a estos datos y a la observación es que debe desarrollarse la estrategia de negocios — afirma Victoria Cole, managing director de Wunderman Buenos Aires—. El que impulsa el cambio tecnológico es el consumidor y es él quien tiene el control y la capacidad de generar nuevas tendencias. La transformación digital es ante todo una transformación cultural y de negocios”.
Mientras las fintech son las empresas que más avanzan en la cuarta revolución, la industria del retail, el consumo masivo y los cuidados de salud están a la retaguardia. En mejor posición está el sector de telecomunicaciones y tecnología, aunque sólo el 32% cree que está al día en los avances tecnológicos. La adopción de tecnología IA (inteligencia artificial) y machine learning se da sobre todo en la industria de telecomunicaciones y tecnología (54%), seguida por las de salud (42%), finanzas (38%), retail (34%) y CPG (28%).
La transformación de los hábitos de compra y pago es una realidad; es por eso que el 65% de las empresas consideró no estar lista para responder ante las necesidades de los consumidores, a los que registran en constante evolución. Las Pymes (por su menor escala) y las que realizan transacciones de ventas de productos están retrasadas en cuanto a la digitalización. Aunque muchas cuentan con aplicaciones, pocas pueden ofrecer soluciones 100% online, a pesar de tener en claro la importancia de utilizarlas para no quedar excluidas en el futuro.