Es una campaña fuerte, y tiene un crescendo hasta llegar al objetivo: las ventas de Navidad. Ya se dice que será “un asalto masivo de Chanel al mercado del perfume”.
Esta vez tiene un apoyo muy especial: Nicole Kidman. Que ya tuvo algún vinculo anterior con la marca. Y el mensaje publicitario está inspirado en el Moulin Rouge.
La estrella australiana reaviva su rol como bailarina de cabaret en un fastuoso y carísimo comercial de dos minutos, que fue dirigido por Baz Luhrmann, precisamente el responsable de Moulin Rouge.
El clásico perfume –“lo único que Marilyn Monroe se ponía para ir a la cama”- eligió muchos años después a Kidman como arquetipo actual del glamour y la elegancia.
La producción de Luhrmann es la mayor inversión en marketing en la historia de la famosa marca francesa, que aun hoy es el líder mundial, pese a que no pudo superar el cuarto puesto en el importante mercado norteamericano, donde es feroz la competencia de Calvin Klein, Givenchy y Dior.
Un cuento romántico urbano
Como en el film en el que el personaje que encarna Kidman cambia a un rico pero insulso aristócrata por un hombre pobre, el aviso es un cuento romántico urbano, filmado durante cinco días en Sydney, donde Luhrmann rodó Moulin Rouge.
En el comercial, Kidman, en un sutil vestido de gasa diseñado por Lagerfeld, huye de los fans y de los paparazzi para meterse en un taxi.
Y en el taxi, justamente, encuentra a un joven escritor sentado en el asiento trasero. Luego se abrazan en el tejado del departamento del autor, donde una enorme doble C del logo de Chanel aparece iluminada por globos lumínicos. Pero después de ese instante, la mujer retorna a su existencia famosa y el hombre se queda con el recuerdo de -como dice el aviso- “su beso, su sonrisa y su perfume”.
La actriz, ganadora del Oscar, sigue con este aviso las huellas de otras famosas estrellas que promovieron la marca: Catherine Deneuve, Ali McGraw y Candice Bergen. A su vez, Luhrmann llega al lugar que alguna vez ocuparon Ridley Scott y Luc Besson para Chanel.
No hay producto
Un interesante detalle: la famosa botella del perfume no aparece jamás durante el film. El pack final, en cambio, se entretiene mostrando un collar de 687 diamantes que forman el logo del Nº 5. Ese collar aparece sugestivamente en la espalda de la actriz.
El aviso de TV aparecerá el 20 de noviembre durante el primer corte de la emisión de Moulin Rouge, en el Canal 4 francés, mientras que la versión de cine se verá algunos días después. También habrá versiones gráficas del aviso en las revistas Vogue, Glamour y Elle de noviembre.
Chanel no reveló el presupuesto de la campaña, pero según algunas fuentes no bajará de 10 millones de dólares en Estados Unidos y 8,2 millones en Europa.
Para el perfume Chanel Nº 5 habrá compañía: los mensajes presentarán, junto al producto, un elixir sensual Chanel de 88 dólares y una crema para el cuerpo de 81.
El Chanel Nº 5 fue creado en 1921 cuando Coco Chanel combinó jazmines, cierto tipo de rosas, hojas de un árbol sudasiático (ylang) y maderas de sándalo, entre otros componentes, para forjar un perfume que hoy se vende a razón de una unidad cada 55 segundos.