El nuevo comercial de Apple de 60 segundos para el iPhone 5 es un retorno al tipo de spot que Steve Jobs hubiera gustado.

El spot se focaliza en la cámara del iPhone y cómo se la utiliza para documentar vidas, con usuarios que toman fotos con amigos, comen comidas en restaurantes y graban sus vacaciones. Es más emotivo que recientes comerciales, aunque cierra con una audaz afirmación: “Cada día, se toman más fotos con el iPhone que con cualquier otra cámara” (No con otro smartphone, sino con cualquier otra cámara).

La publicidad de la compañía, que durante mucho tiempo fue considerada entre las mejores de la industria, ha tenido recientemente una recepción más diversa, debido a avisos impopulares como la muy criticada campaña de Apple Genius, que apareció en el verano de 2012 y los avisos de Siri, plagados de famosos, de un año atrás. Algunos spots más recientes incluyeron música ruidosa y gritos para llamar la atención hacia las apps del aparato.

Después de una serie de avisos como esos, ese spot se siente como lo que fue Apple en otros momentos.