Fernando Avellaneda, director de experiencias de Rapp
No creo que los códigos QR sean la solución, sino un recurso que, bien utilizado, puede generar buenos resultados. El desafío es saber cuándo utilizarlos, sin olvidar que el contenido que le brindamos al usuario sigue siendo lo más importante.
Creer que los QR codes denotan tecnología e innovación por el solo hecho de usarlos es un error. El contenido que brindamos al usuario forma parte de la experiencia que comenzó cuando él sacó su smartphone para escanear el código.
Desarrollar aplicaciones que estén orientadas a dar soluciones al usuario y con foco en la usabilidad, sigue siendo la mejor manera de llegar al cliente.
Juan Francisco Di Nucci, ceo de Must Mobile
Nunca vi los códigos QR como una solución mágica, sino como la evolución del código de barras y como un recurso que, dentro de ciertos contextos y situaciones, puede ser realmente útil. Por ejemplo, en todo lo que sea ticketing, el código de barras bidimensional puede ser enviado por mail, mms, o dentro de una aplicación para ser escaneado en una puerta de embarque, en el cine o en cualquier punto de venta para una promoción. La generación de estos códigos es a costo cero.
En acciones de marketing de proximidad, una herramienta que promete mucho es la de los chips NFC, con los cuales la interacción es más sencilla ya que se establece únicamente por acercamiento. La contra es que se depende del hardware de detección del teléfono que en nuevas terminales como el Iphone 5 no está incluido.
En síntesis, todo en el marketing digital móvil evoluciona rápidamente. Cada año, nos encontramos con una nueva tecnología que busca agilizar y estrechar el vínculo entre los humanos y la red y que estará contenida dentro de un dispositivo móvil. Por eso, nuestro desafío, de aquí en adelante, es pensar modelos de negocios y aplicaciones que puedan aprovechar, en todas sus dimensiones, esas tecnologías.
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