Publicidad > Latinoamérica | LOS FUNDADORES DE GUT LLEVARON LA BANDERA INDEPENDIENTE A CANNES
Redacción Adlatina |

Gastón Bigio y Anselmo Ramos: “No queríamos hablar más de ‘ellos’, ahora todo es ‘nosotros’”

(Cannes, Francia - Por enviados especiales) - El lunes, en una sesión especial con los directivos de las agencias FutureFactor y Chemistry, el argentino y el brasileño repartieron 400 camisetas negras para que todos los asistentes posaran con ellas. Un día después, en diálogo con Adlatina, celebraron los catorce meses que llevan de independencia.

Gastón Bigio y Anselmo Ramos: “No queríamos hablar más de ‘ellos’, ahora todo es ‘nosotros’”
Bigio y Ramos: “La decisión de abrir una tercera oficina, la de San Pablo, se tomó en dos semanas”. (Foto: Adlatina)

Adlatina: Llenaron el Audi A del Palais des Festivals de camisetas negras.
Gastón Bigio: De 400 camisetas negras traídas de Buenos Aires; estuvo muy bueno.

A: ¿Y eso para ustedes simboliza lo indie o… cómo llegaron a eso?
Anselmo Ramos:
Como no tenemos plata para comprar ropa y remeras negras eran la opción más barata. Eso sí, les arruinamos la remera negra a todos: ahora todos cuando vean una remera negra creerán que quien la lleva trabaja en Gut, o quiere trabajar en Gut.
GB: Es parte de empezar a crear cultura. Un pequeño chiste. Estamos tratando de generar cultura con muchas otras cosas. La remera negra fue sólo un chiste, tomarnos un poquito no tan en serio la industria, lo que somos, cruzarnos de brazos, poner cara de serios.
AR: Pero lo tomamos en serio, eh. ¡Estamos usando remeras negras ahora mismo! (risas)

A: ¿El espíritu de la reunión del lunes en qué se materializó?
GB:
Fue contar un poco por qué saltamos, cuál fue la razón del salto, cuáles fueron las decisiones que nos hicieron saltar y cuáles las emociones que nos hicieron saltar. Que está buenísimo haber saltado y que, al mismo tiempo, es terrible haber saltado. Cuáles son las cosas malas y cuáles las buenas de haber saltado.

A: ¿Ya tienen hecho algún tipo de balance? Llevan un año y...
GB:
Y dos meses. Nos gusta transmitir eso, hacer que la gente vea que no es imposible transformarse en independiente, explicar cuáles son las cosas complicadas y cuáles las más fáciles. Transmitir experiencias.

A: Y para decirlo en un concepto: ¿lo mejor del salto qué fue?
AR:
La libertad. La libertad de hacer lo que nos dé la gana y la velocidad con que hacemos las cosas. O sea: estamos operando muy rápido. A una velocidad que a veces nos sorprende. Hace dos semanas Gastón me llamó y me dijo: “Contraté a estas dos personas”. Yo le pregunté: “¿Son buenas?”. “Sí”, me dijo. Y Ok, ya está. La decisión de abrir una tercera oficina, la de San Pablo, se tomó en dos semanas. Analizamos, charlamos, hay oportunidad, ¿qué hacemos?, ¿abrimos?, bueno, let’s go. ¿Hay plata? Sí, creo que hay. Bueno, let’s go, y es todo muy rápido. Muy distinto.

A: ¿Y cuánta gente es hoy Gut?
GB:
Somos 52 en total: quince en Buenos Aires, quince en Miami y veintidós en San Pablo. En tres meses San Pablo creció más que Buenos Aires y Miami.
AR: Sí, San Pablo está creciendo muy rápido, es increíble.
GB: También es diferente: se trabaja distinto, se necesitan más personas, se opera media, es otra cosa.

A: Volviendo un poquito al comienzo de la nota, ¿por qué usan el verbo saltar?
GB:
Porque fue muchísimo tiempo de estar en corporaciones. En mi caso, desde mis 17 años.

A: ¿Y usted, Anselmo?
 AR:
Sí, la mayoría de mi carrera sí. En independientes chiquititas, que no eran famosas, al principio de mi carrera. Pero en general sí, siempre en multinacionales.

 A: Y usted, Bigio, en muchas multinacionales distintas.
GB:
Yo estuve más tiempo casado con una corporación que con mi mujer. Desde los 17 años estoy casado con diferentes corporaciones: J. Walter Thompson, DDB, Ogilvy, Publicis, Saatchi... Todas: menos BBDO, todas. Y el divorcio fue hace un año y dos meses, y fue un salto, porque nosotros teníamos autos ejecutivos, viajábamos en business, teníamos una tarjeta corporativa que pagaba todo, vivíamos gratis. Claro, después cuando viajaba con mi familia íbamos todos en coach, pero jugaba a ser empresario, era el más rico del mundo: me faltaba el avión privado y ya estaba. Por eso es un salto: tenés que saltar a bancarte vos solo y de alguna manera confiar que tus clientes te siguen a vos y no a esa corporación.

A: Y esa postura, ese discurso, ¿es una ventaja para algunos clientes? ¿Compran eso? ¿Significa algo para ustedes?
GB:
Para mí ellos compran a Anselmo y a Gastón, y muestran que lo que compraban eran las personas, y lo que siguen comprando es a las personas. Para mí esto no deja nunca de ser un negocio de personas, y me parece que si la gente en vez de seguir diciendo eso realmente lo cree, animarse a saltar debería ser más fácil, porque te van a seguir a vos.
AR: Yo creo que los clientes compran a nuestra agencia independiente por nuestra participación: porque Gastón y yo tenemos las ideas, estamos en los meetings, nos vemos con los clientes, estamos súper involucrados. Y eso es importante. Nosotros somos dos apasionados por el business y la publicidad y la comunicación. Los clientes sienten eso. Y una independiente es menos burocrática: nos movemos más rápido, nos adaptamos más al mundo de hoy, podemos probar cosas. No hay un ellos. Cuando estábamos en nuestra holding company, con Gastón hablábamos de ellos: “Ellos dijeron eso, ellos dijeron aquello”. Yo no puedo escuchar más ese “ellos”: ahora todo es “nosotros”. Y eso cambia todo.

A: Y el modelo que pego ese salto y armó algo que toda la publicidad admiró por años fue David Droga. Pensando en ustedes, a futuro, ¿no le tienen miedo a un Accenture?
AR:
Pero algo cambió, y creo que toda la industria quiere ver qué va a pasar con ese partnership.
GB: Pero es correcto: de nuestra generación él fue el modelo a seguir, fue el tipo que hizo todo bien y ahora es el tipo que está probando algo diferente. Hay que darle el crédito de ver qué pasa.

A: Pero, pensando en ustedes y volviendo a la pregunta: ¿si se les viene de acá un tiempo un inversor?
GB:
Si gano los millones que tiene David y después la vendo en diez años, ahí veré si me hace mal eso. Yo creo que al tipo se lo ve muy realizado: ganó el Lion of St Mark, que es el que quiere ganar aquí Anselmo (risas). Yo creo que si a Anselmo le das el Lion of St Mark ya no le importa más nada (más risas). Pero volviendo a Droga, me parece que el tipo es incriticable, realmente puso un ejemplo para todos nosotros y para un montón de gente más. Y hoy es el referente: para mí es EL referente que tiene esta industria. Es muy fuerte la movida, implica mucho, y a su vez, para mí, la movida reivindica. Porque la movida es tuvieron que comprar la más creativa de todas. Comprando a una persona sola vos no podés hacer cultura, pero comprando la agencia entera quizás sí podemos hablar.
AR: Lo que no se sabe es si la cultura va a cambiar o no.
GB: Ese es el leap of faith que hay que darle.
AR: Yo diría que Dan Wieden también es otro modelo para nosotros.

A: Sí, claro, pero Wieden no “saltó” de ningún lado, él nació independiente.
GB:
Es cierto, el modelo de “saltador” que nosotros tomábamos era Droga.
AR: Está bien, pero eso que tiene Wieden de querer ser “independent forever” me vuelve loco.

A: Se entiende. A escala latinoamericana, un fenómeno parecido al de Dan Wieden siempre fue el de DPZ en Brasil. Roberto Duailibi, Francesc Petit y José Zaragoza fueron independientes toda su vida, mientras todos los holdings se los querían comer. Y finalmente, cuando ya estaban viejitos y semirretirados, terminaron comiéndoselos y dejaron de ser aquel modelo.
AR:
Estoy de acuerdo, pero eso ocurrió cuando ya no podían más.

A: Pero Gut está arrancando su camino independiente, y con muchas agallas.
GB:
Por supuesto. Se vienen meses muy moviditos, ya se va a ir enterando todo el mercado.


ALGUNAS INSTANTÁNEAS DE GUT EN CANNES LIONS