Management > Argentina | DIÁLOGOS CON LAS WOMEN TO WATCH ARGENTINA 2019
Redacción Adlatina |

Laura Najlis: “Hoy el consumidor es consciente de su poder como cliente”

La directora de marketing y comercial de Cinemark Argentina & Paraguay conversó con Adlatina sobre su distinción para el evento que se realizará en el Hotel Four Seasons el 27 de abril.

Laura Najlis: “Hoy el consumidor es consciente de su poder como cliente”
Laura Najlis, directora de marketing y comercial de Cinemark Argentina & Paraguay: “Women to Watch es un reconocimiento muy lindo en mi carrera profesional, y valoro mucho que me hayan distinguido con el mismo”.

─¿Qué significa para usted haber sido elegida Women to Watch Argentina? ¿Qué importancia tiene este reconocimiento?
 ─Women to Watch es un reconocimiento muy lindo en mi carrera profesional, y valoro mucho que me hayan distinguido con él. Tanto dentro de la compañía en la cual trabajo como diferentes personas y contactos de la industria y ex compañeros de estudios se han contactado conmigo para felicitarme, lo cual siempre es agradable y claramente denota la visibilidad de la distinción.

─¿Cómo es su trabajo dentro de la empresa? ¿Qué evolución considera que hizo?
 ─Actualmente me encuentro a cargo de toda la estrategia de marketing y comercial para nuestras marcas Cinemark y Hoyts, tanto en la Argentina como en Paraguay. Tengo un muy lindo equipo de dieciocho personas, sumamente entusiastas, y con quienes llevamos a diario todas las iniciativas para alimentar esta industria y este negocio que es tan lindo, tan amplio, y tan cercano a la gente. No sólo vendemos entradas de cine, pochoclos y bebidas, comunicación, eventos y actividades en nuestros cines, sino también entretenimiento, experiencias y un plan para todas las edades, todos los segmentos y todos los formatos: familia, pareja, amigos... que siempre nos hacen bien. Esto hace que nuestro día a día, nuestros objetivos y nuestros desafíos tengan un motor especial, y nuestra industria y nuestra compañía es tan pero tan linda que nos permitem además de aprender y crecer profesionalmente, disfrutar un montón lo que hacemos. Empecé en Cinemark en 2011, luego de la adquisición de Hoyts General Cinemas, donde yo me desempeñaba como gerenta de marketing desde 2008. Desde ese momento hasta la fecha pude aprovechar las buenas experiencias en términos de impacto digital en el negocio de Hoyts y desarrollar toda la estrategia digital de la compañía, tanto a nivel comunicación como nuestro ecommerce y aplicaciones de venta de entradas, que tanto mejoraron la experiencia del espectador de cines. Trabajamos codo a codo con los estudios en el lanzamiento de sus películas en la Argentina y desarrollamos acciones diferenciadoras, promocionales y de tráfico a nuestros cines, y estrategia de comunicación y captación de clientes, entre otros. A su vez, creamos nuestro programa de loyalty Cine Fan, con todos los desafíos que un proyecto de estas características implica en un contexto como el nuestro, y las oportunidades que genera en términos de conocimiento de nuestros clientes, y mejora en los KPIs del negocio.

─¿Nota algún cambio en los consumidores? ¿Qué cree que significa hoy el cine para el consumidor teniendo otras plataformas como Netflix?
 ─En líneas generales los consumidores han cambiado muchísimo a través de los años, y claramente el enorme acceso a la información y los canales multidireccionales que permiten a todos hoy no sólo ser receptores, sino también emisores, cambiaron por completo las reglas del juego. El tiempo, como un bien escaso; la enorme oferta de contenidos y la accesibilidad a ellos; el foco en la experiencia; y la unificación del estándar de calidad esperado a nivel multiindustria (ya no competimos sólo dentro de nuestra industria) nos presentan un consumidor muchísimo más exigente, que espera lo máximo por el tiempo y el dinero que invierte, y que es consciente de su poder como cliente. El cine no sólo compite con una marca o una plataforma de contenido. El cine es una propuesta de entretenimiento que compite con cualquier opción de esparcimiento entre las tantas que pueden tener hoy un individuo y su tiempo, que es un bien escaso. Partiendo desde ese lugar, el cine es un plan, es una experiencia multitarget, definida por la película que uno va a ver y las personas con las que comparte esa experiencia. Ir al cine es una experiencia social, en la cual uno comparte la sala no sólo con la/s persona/s con las que asiste, sino también con un montón de otros extraños: estamos todos allí reunidos con un mismo fin de entretenernos y pasar un momento agradable. Y ese momento no se remite exclusivamente a la sala: está elegir qué vamos a ver, ponernos de acuerdo en lo que vamos a compartir, y también está el después: la charla, el debate, la comida o las redes sociales, recordando momentos de la peli, compartiendo sensaciones, miradas, apreciaciones. Todas cosas que vuelven a acercarnos, que vuelven a juntarnos en el intercambio y en la interacción. Y entendemos esta experiencia de ir al cine como algo siempre positivo, más allá de la película. Destinar el tiempo de cada uno para ir al cine en pareja, con amigos, familia, hijos o solos es siempre un momento de disfrute, que nos hace bien, que nos nutre, que nos agrega, que nos hace pasar un momento agradable. Todos esos atributos únicos que tiene el cine son los que les dan mística a esa experiencia: el olor a cine, ese cálido y dulce aroma a pochoclo que nos invade desde el momento en que nos acercamos a la puerta de ingreso, o que vamos sintiendo desde el estacionamiento, los colores, los posters de las películas, ese mundo imaginario de los creadores de las películas que resulta tan fascinante, la sala, esas butacas casi mágicas que nos transportarán al mundo que nos presenta el director, esa pantalla enorme y el sonido envolvente que realmente nos terminan de transportar a otro espacio y tiempo, esa desconexión del contexto, y la conexión con la historia que sólo se consigue estando ahí, en el cine, y que pocas experiencias de esparcimiento pueden proporcionar.

─¿Cómo definiría al marketing dentro de la región? ¿Qué temas cree que son importantes en el área?
 ─Creo que los cambios del consumidor y este rol empoderado que tiene hoy es un tema central. Los cambios en los canales de comunicación, en la forma de consumo de información, y en la valoración de experiencias por encima del producto físico en sí: hoy cada vez alcanza menos lo que antes era todo. Hoy los periféricos al producto o el servicio en sí mismo tienen tanto o más valor y definen el precio y el valor percibido. Y para la mayoría de las empresas cuesta entender que el modelo de negocio, los márgenes, y los esquemas tradicionales pueden dejar de servir más rápido de lo que se imaginan; y cuesta soltar ese esquema conocido, hasta que otro jugador que ni siquiera es parte de la industria actual rompe el paradigma, cambia las reglas del juego, y ya es tarde para reinventarse.

─¿Qué es lo que más le gusta de su trabajo? ¿Hay algún referente que tenga en cuenta a la hora de iniciar o finalizar algún proceso de trabajo?

 ─Creo que lo que más me gusta es la posibilidad de hacer. Son los desafíos constantes, el espacio para correr los limites continuamente, proyectar, emprender, desarrollar, implementar, y obtener resultados: buenos, malos, y aprender continuamente. Nuestra industria es muy linda, muy dinámica, y vendemos experiencias y momentos positivos y valorados por la gente. Esto, sumado a un equipo de trabajo de reportes, proveedores, pares y un líder con las mismas ganas y entusiasmo, en que todos nos ponemos a pensar y trabajar con el mismo rumbo, componen la fórmula perfecta para el éxito de nuestros proyectos, tanto a nivel corporativo como a personal e individual. Generalmente recurro a ellos en diferentes momentos, de cualquier inicio o finalización de proyecto, ya que siempre agregan valor y una mirada diferente a la que yo puedo tener.