Marketing > Estados Unidos | ÚLTIMA ENTREGA EXCLUSIVA DESDE AUSTIN
Redacción Adlatina |
Por Juan Korman
Director ejecutivo de Fit BBDO, Argentina
#SlideOfTheDay#6 #SXSW2019
En el último tiempo y a través del poder de las redes sociales como herramienta, la sociedad se volvió más militante.
Frente a diferentes conflictos sociales, como la igualdad de genero, la ley sobre el aborto o algún caso conmocionante particular, nos manifestamos en nuestras plataformas sociales y salimos a la calle.
Por ejemplo, en el Día de la Mujer, el último año en Estados Unidos hubo 425 eventos en los que participaron más de 4,5 millones de personas.
Los debates se mediatizan y los feeds, también.
Frente a este fenómeno, según Mike May (VP of strategy de la agencia Huge), las marcas se pueden agrupar en: marcas proactivas, reactivas o pasivas.
Las marcas proactivas son aquellas que toman partido, como Patagonia, Levi’s, Nike, Gillete o Dick Sporting Goods, entre otras. Esta última, por ejemplo, dejó de vender armas a menores de 21 años luego del multihomicidio en una escuela en Florida, Estados Unidos.
La marcas reactivas responden a un problema conyuntural en el que se ven involucradas, como hizo el medio ABC, que decidió sacar del aire la serie Roseanne tras un tuit descriminatorio de su protagonista, la actriz Roseanne Barr.
Por último, las marcas pasivas son las que pueden tener un propósito social, pero ninguna acción, como Burger King o Domino’s pizza.
Este slide de Mike May muestra el grado de impacto que generan las marcas según el nivel de pasión que despierta el conflicto social y el nivel de acción de la marca.
A mayor grado de acción y mayor pasión, mayor repercusión. Esa repercursión puede medirse en diferentes aristas: social conversation, top of mind, ventas en ecommerce, etcétera.