Publicidad > Estados Unidos | (AD AGE) - POR SAN VALENTÍN
Redacción Adlatina |
Lee Clow, la mente creativa detrás de comerciales como Think Different, de Apple, e Impossible is Nothing, para Adidas, se retira.
A partir de hoy, el chairman de TBWA/Media Arts Lab y director de media arts de TBWA/Worldwide pasará a tomar un puesto de asesor como chairman emérito en Media Arts Lab. Clow se unió a la agencia conocida como Chiat/Day (una vez llamada Chiat Día y Noche debido a la dedicación de los empleados con la agencia) justo después de su fundación medio siglo atrás, cuando apenas tenía un par de cuentas y 14 empleados. Era conocido por ser cercano al fundador de Apple, Steve Jobs, y contó a los participantes del Ad Age’s Small Agency Conference en julio de 2018 que Jobs los eligió a él y Chiat/Day para que realicen sus mejores trabajos. Primero en los años 1980s, y luego al comenzar nueva mente su relación en 1997, cuando Jobs volvió a Apple y contrató de nuevo a la agencia.
“Posiblemente, ya me quedé más de lo necesario -dijo a Ad Age-. No hay mucha gente de mi edad que siga teniendo permitida la entrada a la oficina”.
Clow, de 75 años de edad, anunció formalmente el cambio en una “Nota de amor a la publicidad”, distribuida, apropiadamente, el 14 de febrero.
El cofundador de la agencia, Jay Chiat, “disfrutaba de mandar cartas de amor a la agencia”, escribe Clow en su misiva, que incluye un dibujo garabateado del creativo barbudo: “Yo nunca mandé una. Pero me pareció que sería una gran manera de terminar la celebración de los 50 años de Chiat/Day y mi viaje con la compañía”.
Inicialmente, Clow anunció sus intenciones de retirarse en octubre, en el cumpleaños de Jay Chiat, ya que explicó que “parecía un buen momento”.
“Estuve amenazando con esto durante un tiempo -dijo-. Me pareció que el cumpleaños de Chiat era algo apropiado y se sentía bien”.
A pesar de que no estará más involucrado en el día a día, Clow señaló que su nuevo puesto como chairman emérito es un trabajo fácil.
“Lo definí como para poder entrar y jugar con cualquier cosa que me interese y no tener responsabilidad de nada”, bromeó.
Con respecto a su vida de “retirado”, Clow ya tiene planes para llenar el tiempo. Por años, estuvo filmando almuerzos con gente que trabaja en la agencia. Dijo tener “19 almuerzos y algunas historias asombrosas sobre el trabajo que hicimos y la gente loca que forma parte del negocio”. Planea transformarlos en una serie de videos con múltiples partes. “Esa va a ser mi salida mirando hacia el futuro”, comentó.
Clow dijo que su deseo para la industria es que pueda recordar el valor de una idea simple.
“Lo que está sorprendiendo a nuestra industria es la complejidad de mandar mensajes al mundo con todas estas nuevas herramientas y todas estas nuevas tecnologías. Son avasalladoras —explicó—. Creo que una búsqueda de simplicidad e ideas puras es el único camino para hacer que todo sea divertido otra vez. Hoy más que nunca, el objetivo tiene que ser encontrar ideas valientes y diferentes”.
“Feliz día de San Valentín”, cierra su carta. “Con amor, Lee”.
De: Lee, con amor.
A Jay Chiat le gustaba mandar cartas de San Valentín a la agencia.
Yo nunca mandé una.
Pero me pareció que sería una gran manera de terminar la celebración de los 50 años de Chiat/Day y mi viaje con la compañía.
Durante el cumpleaños de Jay en octubre, durante una fiesta celebrando los 50 años de Chiat/Day, dije a todo el mundo que me retiraba oficialmente .
Los años que pasé haciendo esta cosa llamada publicidad fueron divertidos, desafiantes, gratificantes, enloquecedores, a veces dolorosos, pero en su mayoría alegres.
Y no cambiaría un día de ellos por nada.
Venir al “trabajo” todos los días con la gente más inteligente, alegre y apasionada del negocio; todos nosotros con el objetivo de crear mensajes para el mundo que serán vistos, de los que la gente hablará, e incluso serán famosos.
Hacer reír, llorar o pensar a la gente. Descubrir algo nuevo, ver el mundo de manera distinta, ¿quizás hasta comprar algo?
Ser artistas de medios.
Y recordar a la gente. Los divertidos. Los locos. Los más inteligentes. Los que no son los más inteligentes.
Los socios. Los clientes. Los mentores. Cómo nos desafiamos. Cómo nos inspiramos. Haciéndonos mejores entre nosotros.
Así que esta es una carta de amor a la “publicidad”.
Este negocio loco que me dio todo. Amistad, orgullo, logros y amor.
Y a toda la gente que conocí a lo largo de los últimos 50 años, y a todos los de ustedes que van a continuar, feliz día de San Valentín.
Con amor, Lee.