Publicidad > Argentina | LA INDUSTRIA REGIONAL DE ANIMACIÓN COMO HORIZONTE
Redacción Adlatina |
Estudiantes, diseñadores gráficos, directores y productores de cine confluyeron en la segunda jornada de Expotoons, realizada en el Teatro Vorterix.
En esta ocasión una de las conferencias más destacadas fue la brindada por los productores Pato Scala, de PunkRobot Chile; Sergio Martinelli, de Film&Arts y Zoyo Brasil, y Fernando Vallejo, de Animec Ecuador, que discutieron sobre los obstáculos, desafíos y posibilidades de la coproducción entre los países de la región para la realización de films de animación.
“Es necesario generar una industria audiovisual regional y conocer las leyes de financiamiento que rigen en cada uno de los países”, comentó Pato Scala. En ese sentido, el representante de PunkRobot aseguró que las productoras chilenas se presentan como buenas socias para el desarrollo de producciones audiovisuales, dado que el estado trasandino proporciona facilidades de financiamiento a través de CNCA, el fondo más importante para el desarrollo de la tevé en Chile y de CORFO, un organismo que financia el proyecto desde el inicio hasta su distribución.
Asimismo, Scala señaló que las productoras de los diversos países de la región deberían conseguir fondos (privados y estatales) para producir en común, con el fin de generar productos competitivos que trasciendan las fronteras nacionales.
En esta misma línea se pronunció Martinelli al manifestar que es un momento propicio para coproducir porque es una estrategia que permite ampliar el mercado de exhibición. En este aspecto, señaló que Brasil está generando diversos canales para comunicarse con los actores de la industria y proporcionarles apoyo financiero. El objetivo, según Martinelli, es llegar al mercado internacional.
Sin embargo, no todos los disertantes estuvieron de acuerdo sobre las ventajas de coproducir. En una posición opuesta a la de los productores chileno y brasileño, Vallejo sostuvo que es difícil el trabajo regional porque existen ciertos mercados, como el ecuatoriano, menos desarrollados que otros en el área de producción audiovisual, lo cual lleva a una lucha de poderes en la que resultan victoriosos los países con mayor trayectoria. “Ecuador es una cinematografía emergente, donde se compran muchos productos audiovisuales enlatados porque son más baratos que ponerse a producir. En este contexto, el país con menos desarrollo tiene poco dinero que ofrecer, razón que permite que el co-productor con más recursos y experiencia tenga un mayor control sobre la ejecución del film”, dijo.
Por este motivo, el realizador ecuatoriano expresó que el sector audiovisual en su país apuesta a que los coproductores sean los usuarios online, con lo cual la producción está abocada a la creación de proyectos distribuidos mediante internet.
Los productores coincidieron en que es difícil que los inversores apuesten al cine porque es muy riesgoso el retorno de la inversión. Aunque advirtieron que no se puede depender exclusivamente de los fondos estatales y que las productoras de los diversos países deben aliarse para generar estrategias que les permitan acercarse a los inversionistas privados.
De esta manera, para que un film sea atractivo para los inversores, los productores concluyeron que se debe generar un plan que detalle si diversos productos como videojuegos y merchandising pueden derivarse de la película.