Por Ximena Díaz Alarcón
Cofundadora, partner y CEO de Youniversal
El SXSW tuvo un buen comienzo, con muchos asistentes y conferencias en paralelo, de las cuales pueden destacarse algunos highlights y temáticas preliminares:
-Recuperar las voces del pasado a través de tecnología actual: instalaciones artísticas que recuperan ―mediante inteligencia artificial― las palabras de poetas, sabios y activistas, para reflexionar sobre la inequidad actual en cuanto a género o raza.
-El poder de las plantas: esta temática se vio en múltiples charlas y en todo sentido. Desde tendencias en alimentación plant based y cómo ayudar al cambio de preferencias del consumidor hasta plantas creando música a través de datos. Un device llamado Plantwave traduce datos de las plantas y crea música con ellos. Un lugar de respiro y reconexión con uno mismo, en medio de todos los estímulos del festival.
-Lo humano como diferencial frente a lo tecnológico: una de las key sessions del día estuvo a cargo de Greg Brockman, cofundador de OpenAI (Dall-E y ChatGPT). El especialista en tecnología expresó que el futuro de estas tecnologías generativas era aumentar las capacidades humanas y que el aporte humano en el trabajo y el conocimiento del futuro sería tener criterio y edición frente a tanta información nueva que la tecnología podría crear. Se debatió sobre el derecho de autor y el copyright, y los desafíos para los creadores de contenido, así como sobre la necesidad de instalar parámetros éticos y regulaciones para evitar los efectos sociales negativos de una innovación con esta capacidad de disrupción.
-Repensar nuestro propósito con lo que más nos une como humanos: la muerte. Una charla muy interesante a cargo de Matthew Kochmann, fundador y CEO de Trascend, una empresa que busca crear impacto sustentable a partir de la muerte. Su propuesta es reforestar el planeta a partir de transformar los entierros en árboles. Tree Burial crea vida a partir de la muerte al devolver a las personas a la tierra de forma natural para que su biología pueda vivir literalmente como un árbol. Ser y estar en la naturaleza como un todo, con árboles alimentados con cuerpos que ayudan con sus nutrientes a que crezcan fuertes y puedan capturar más CO2 del ambiente. En una respuesta exclusiva para nosotros, Kochman comentó que, más allá de que hoy su foco está en los Estados Unidos, está abierto a hacer crecer la propuesta en América Latina, dado el impacto planetario que esto podría tener como aporte a la sustentabilidad y el potencial de expandirlo a otros mercados.
SXSW 2023 - DÍA 1